FORMACIÓN DE LAS ESTRELLAS.
Las estrellas se forman en las regiones más densas de las nubes moleculares como consecuencia de las inestabilidades gravitatorias causadas, principalmente, por supernovas o colisiones galácticas. El proceso se acelera una vez que estas nubes de hidrógeno molecular (H2) empiezan a caer sobre sí mismas, alimentado por la cada vez más intensa atraccion gravitatoria . Su densidad aumenta progresivamente, siendo más rápido el proceso en el centro que en la periferia. No tarda mucho en formarse un núcleo en contracción muy caliente llamado protoestrella. El colapso en este núcleo es, finalmente, detenido cuando comienzan las reacciones nucleares que elevan la presión y temperatura de la protoestrella. Una vez estabilizada la fusión del hidrógeno, se considera que la estrella está en la llamada secuencia principal fase que ocupa aproximadamente un 90% de su vida. Cuando se agota el hidrógeno del núcleo de la estrella, su evolución dependerá de la masa y puede convertirse en una enana blanca o explotar como supernova, dejando también un remanente estelar que puede ser una estrella de neutrones o un agujero negro. Así pues, la vida de una estrella se caracteriza por largas fases de estabilidad regidas por la escala de tiempo nuclear separadas por breves etapas de transición dominadas por la escala de tiempo dinámico.
Muchas estrellas, el Sol entre ellas, tienen aproximadamente simetria esferica por tener velocidades de rotación bajas. Otras estrellas, sin embargo, giran a gran velocidad y su radio ecuatorial es significativamente mayor que su radio polar. Una velocidad de rotación alta también genera diferencias de temperatura superficial entre el ecuador y los polos.
La mayoría de las estrellas pierden masa a una velocidad muy baja. Sin embargo, en las últimas fases de sus vidas, las estrellas pierden masa de forma mucho más intensa y pueden acabar con una masa final muy inferior a la original. Para las estrellas más masivas este efecto es importante desde el principio. Así, una estrella con 120 masas solares iniciales y metalicidad igual a la del Sol acabará expulsando en forma de viento estelarmás del 90% de su masa para acabar su vida con menos de 10 masas solares. Finalmente, al morir la estrella se produce en la mayoría de los casos una nebulosa planetaria una supernova o una hipernova por la cual se expulsa aún más materia al espacio interestelar. La materia expulsada incluye elementos pesados producidos en la estrella que más tarde formarán nuevas estrellas y planetas, aumentando así la metalicidad del Universo.
FORMACION DE LAS GALAXIAS .
Para explicar la formación de las galaxias existen dos teorías:
El universo actual, esta cubierto por grandes acumulaciones de gases y estrellas, que se encuentran débilmente unidas por la fuerza de la gravedad. Fue de esas crisálidas cósmicas, (llamadas protogalaxias) de dónde han emergido las galaxias que hoy observamos. Exactamente cómo fueron formadas las protogalaxias es uno de los debates siempre presente dentro del seno de la comunidad de estudiosos del cosmos.
Una de las explicaciones para la formación de las protogalaxias nace de una consecuencia rigurosa con la física. Esta nos indica que es la gravedad el principal factor para que se formen esos objetos en el espacio. Un grumo primordial genera una atracción.
La materia de sus alrededores reacciona juntándose, aumentando su masa e incrementando la gravedad. Este proceso se amplifica por sí mismo, al igual que como se comporta una bola de nieve cuando se desprende en caída desde los altos de una montaña.
Así habrían nacido las galaxias del cielo, (condensando parte de la materia dispersada por el universo) y, si se quiere, con agujeros negros incluidos en sus núcleos centrales.
En el proceso que hemos descrito para el nacimiento de las galaxias en el universo es necesario hacer una precisión. No existía ninguna posibilidad de que aquel proceso se pudiese haber llevado a cabo si la materia hubiese sido absolutamente homogénea, ya que cada partícula, atraída de igual manera por todas las que la rodean, permanece en el estado inicial.
Pero ello cambia, cuando materia incrementa levemente su densidad por sobre el medio circundante, lo que hace que se genere un proceso de atracción y, de ahí, a la constitución de las protogalaxias.
Otra versión explicativa de la formación de las protogalaxias, es aquella que recurre a extensas ondas de choque, la que podría ser denominada como la teoría de las explosiones cósmicas. Ésta, parte de la premisa de que los gases primordiales se encontraban, entonces, repartidos en forma uniforme y que requirieron de alguna fuerza exógena para iniciar la evolución de gases a protogalaxias.
En un escenario, un número reducido de estrellas se formaron a partir de las regiones más densas de gas que comportaba el cosmos primitivo. Las más masivas de esas estrellas explosionaron como supernovas, creando cataclísmicas ondas de choque que empujaron los gases circundantes en densas nubes. Y, es a partir de esas nubes, es que las estrellas se fueron formando y constituyendo las modernas galaxias que hoy observamos.
Realizado por : Laura bocanegra gonzalez


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